LYKKE (2025)
Los daneses Sunken se han tomado su tiempo, casi cinco años, para tener listo su tercer larga duración, algo del todo comprensible, en un estilo como el que practican, es relativamente sencillo agarrarse a lo conocido y dejarse llevar, repitiendo la fórmula una vez más sin mayores preocupaciones, sin embargo este no el caso, desde la extensa duración de los cuatro temas que conforman este "Lykke" logran atraparnos en un majestuoso ambiente lleno de sensaciones y contrastes. Lo anteriormente comentado viene a hacer referencia a bandas de black atmosférico en las cuales es difícil encontrar un equilibrio entre agresividad y ambientación, dejando siempre una puerta demasiado abierta a los sonidos más accesible y a lograr dibujar esos paisajes evocadores a fuerza de explotar su vertiente más melódica y limpia. Sin embargo Sunken en este álbum logra trabajar diferentes facetas de un black directo, profundo y poderoso, al mismo tiempo que entrega también un buen puñado de secciones emotivas y evocadoras, surgiendo de ese contraste una dualidad en su música, que por complicado que parezca, logra un delicado equilibrio. Vamos a decir que la duración de los temas, extensos todos ellos, juega a favor del resultado final del álbum, permitiéndoles explorar en cada uno de ellos diferentes terrenos, desde unas intros limpias y emotivas que poco a poco se van tornando en pasajes mucho más directos y agresivos, capaces de llevarnos hacia terrenos más propios de un black al uso, para ser capaces otra vez de volver a parar y regresar hacia una ambientación más intimista, llena de sensaciones de rabia o desazón, pero también de depresión y tristeza. Para ello se sirven de un trabajo de guitarras que se mueve por diferentes secciones, desde las crudas, hasta otras melódicas, rodeado de una capa de sonidos entres lo orquestal y lo melódico que lo va empapando todo de una patina de engañosa melodía y cierta accesibilidad, aspecto que se desarrollan también en las voces, unas veces más comedidos pero otras desatando una furibunda sensación de desolación y desesperación. Un álbum que no busca encajar en el panorama actual de black atmosférico, tal vez haya llevado su propuesta a terrenos más diferenciales y menso accesibles, combinando perfectamente melodía y agresividad, con crudeza y abatimiento. (7,6) .



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