PESTEN SOM TAR OVER (2023)
Siete años de silencio se ven interrumpidos por la edición de este "Pesten som tar over" un álbum que cuenta con la presencia de un nuevo vocalista en sus filas y que sirve para reafirmar la identidad de la banda, alejándola de terrenos que puedan remitir a "supergrupo". Un álbum mucho más definido en cuento a sonido, que a lo largo de sus casi sesenta minutos de duración logra atraparnos en sus entresijos, siempre con un ojo puesto en la vertiente más tradicional del black. Den Saakaldtehan parió un álbum de un sonido potente, en donde el entramado de guitarras logra mantener el pulso a un sonido de batería rápido y directo, acompañado de un sonido denso, de violentos y profundos riffs, con protagonismo tanto para las diferentes capas que se van superponiendo en la mezcla, con un base demoledora, pero con unas guitarras en superficie que se mueven por terrenos entre lo melódico y lo crudo, con influencias que podemos situar en el rock más clásico, sin pasar por alto el peso que tiene un instrumento como el bajo, que dota de una mayor consistencia el conjunto. Las voces por su parte se mueven en terrenos de la rabia y la oscuridad, con un carácter muy clásico, sim embargo hay pasajes que abordan terrenos mucho más limpios y es que la larga duración de los temas por un lado permiten que nos sumerjamos en el profundidades del sonido de este álbum, ofreciendo un carácter casi que inmersivo, tanto por las partes más lineales como en aquellas que con pequeños cambios de ritmo se nos van desgranando un abanico más amplio de sensaciones, algo similar a lo que que con las voces, capaces de sorprendernos con secciones alejadas de lo convencional. Un álbum que en definitiva se muestra descarnado y profundo cuando el black más tradicional cobra protagonismo, pero con un buen puñado de elementos adicionales que trastocan ese equilibrio trasformando ese sonido más black en un tono mucho más emotivo. (7,6).
